Dos jóvenes de Texas a los que según un diagnóstico no vivirían más allá de los siete años, recientemente se graduaron del instituto. Su historia de perseverancia y amistad enternecerá e inspirará hasta los corazones más duros.
Mejores amigos vencieron las probabilidades para caminar por el escenario y graduarse juntos
Dos jóvenes a cuyos padres los médicos les dijeron que sus probabilidades de supervivencia serían de alrededor de un 2%, que nunca caminarían, y que vivirían en estado vegetativo si pasaban los 7 años, caminaron por el escenario y se graduaron juntos en Texas hace unos meses.
“Quiero que se les vea como los milagrosos seres humanos que son”
Los chicos se conocieron en preescolar, cuando Jordan se presentó a Odin mordiendole la oreja, y Odin respondió pellizcándole la pierna. Tras eso fueron inseparables en clase”, contó Frost a Annie Reneau para Upworthy.
“Aunque los dos chicos son básicamente no verbales, tienen una conexión el uno con el otro que sólo puedes sentir cuando están en la misma habitación”, dijo Frost. Antes de la pandemia , Odin y Jordan se veían todos los días ya que sus clases estaban al cruzar el pasillo. Odin solía traer música a la escuela para compartir con su amigo. “Los dos disfrutan de los largos viajes en coche escuchando música lo más alto posible”, explica Frost, “y pellizcándose el uno al otro, por su puesto”.
“A ambos les gusta molestar a su madre y a su padre, lo más probable es que tengan un lenguaje secreto con el que ríen y bromean al hacerlo”, añade.
Frost dice que él y su mujer han sido amigos de los padres de Jordan durante los últimos 15 años, ya que han criado a los niños juntos. La madre de Jordan ha sido peluquera durante 25 años y es “la única persona lo suficiente rápida y valiente” para cortarle el pelo a Odin.
Ver caminar a su hijo el escenario de graduación fue significativo para Frost de muchas maneras. Él mismo dejó el colegio y se quedó sin hogar a los 13 años. Nunca consiguió recibir un diploma y hacerlo con su hijo Odin se sintió “trascendental”.
El camino para Jordan también fue trascendental, ya que comenzó a caminar por primera vez a finales de 2019.
“Ayer se graduaron juntos en estos tiempos tan extraños en los que vivimos”, dijo Frost, “y honestamente, verles y ser parte de ello me dio mucha esperanza. Verles y saber por lo que han pasado estos dos y además llegar a experimentar la graduación del instituto para dos chicos con tan pocas expectativas ha sido una de las cosas más hermosas que he podido presenciar”.
Frost espera que compartir la historia de Odin y Jordan ayude a que los niños sean vistos. "Y no vistos desde una forma de asombro o para que la gente se sienta mal por ellos", dice Frost. "Quiero que sean vistos por los seres humanos milagrosos que son".
“Solo porque alguien no sepa hablar no quiere decir que no pueda entenderte”, añade Frost. “Solo porque algo no te parezca “normal” no lo hace menos. Ambos chicos tienen tanta personalidad, empuje, ingenio, humor y alegría en ellos como para llenar de alegría el corazón de cualquiera. La determinación para vivir y vivir al completo que estos dos maravillosos seres humanos tienen deberían inspirar a cualquiera que lo esté buscando”.
Frost dice que la familia ha recibido una avalancha de positivismo tras compartir la foto de los chicos y un poco de su historia en las redes sociales, lo que ha sido alentador.
“Ellos traen alegría”, dice.
De hecho ellos son. Felicitaciones por su graduación, Odin y Jordan. Os deseamos el mejor y más brillante futuro posible.
El padre de Odin, Tim Frost, habló con Annie Reneau, para Upworthy.
Personas que demuestran que nunca hay que rendirse
Hay muchas más historias similares a la de estos amigos alrededor del globo. Personas que han tenido que aprender a vivir con sus propias condiciones físicas y mentales en un mundo lleno de prejuicios e impedimentos.