A falta de menos de un kilómetro del maratón de 42 kilómetros, los compañeros de entrenamiento de origen somalí luchaban con Lawrence Cherono por las dos últimas plazas de medalla, después de que el compañero de equipo del keniano Eliud Kipchoge se hubiera asegurado el oro.
La amistad es lo primero: Nageeye anima a Abdi a cruzar la meta del maratón
Las imágenes ya son virales. Tres hombres exhaustos esprintando hacia el podio en el maratón olímpico. Uno es claramente el más fuerte. Pero en lugar de ir directamente hacia su objetivo, mira constantemente hacia atrás, hacia sus perseguidores. Agita la mano. "¡Vamos! ¡Venid! Venid al podio".
Detrás del fenomenal campeón defensor, el keniano Eliud Kipchoge, el holandés Abdi Nageeye siguió los pasos de Gerard Nijboer (segundo en 1980 en Moscú) al esprintar hacia la plata en el maratón olímpico. Y para su alegría, su compañero belga Bashir Abdi se abrió camino hasta el bronce a pesar de sus molestias en los isquiotibiales. — NOS
«Ellos querían esto para el otro,»
Nageeye y Abdi son descendientes de somalíes y llegaron a Europa muy jóvenes para empezar una nueva vida. Nageeye se fue a Holanda y Abdi acabó en Bélgica. Ambos tienen ahora familia. Los dos se conocen desde 2008, se entrenan juntos y viajan juntos por el mundo.
Su compañero maratonista, el holandés Frank Futselaar, habló en el estudio de NOS sobre el vínculo entre Nageeye y Abdi. "Esa amistad ha hecho mucho por su motivación para lograr esto", dijo Futselaar. "Querían esto el uno para el otro. Esa energía que surge en los últimos 200 metros también se debe a todos los intensos entrenamientos que hicieron juntos. "Que puedas compartir esto con tu mejor amigo no tiene precedentes".
Fue un maratón especial para el director de atletas Jos Hermens. Además de Nageeye y Abdi, el ganador Eliud Kipchoge también pertenece a su establo de gestión Global Sports Communication. "Increíble, qué carrera", dijo Hermens en NPO Radio 1.
Para Hermens, la actuación de Nageeye, de 32 años y poseedor del récord de Holanda (2.06.17), fue la más sorprendente. "Es mágico cómo lo terminó entre los mejores del mundo", dijo Hermens. "Fue undécimo en Río, pero la plata es demasiado extraña para las palabras. Estoy muy orgulloso de él". Segundo detrás del mejor maratonista del mundo".
El hecho de que Nageeye también guiara a su amigo Abdi hasta el bronce, completó el cuento de hadas para Hermens. "La cumbre de la amistad. Si no hubiera traído a Bashir, no habrían podido ganar a ese chico keniano. Muy bonito". Traducido del holandés, basado en un artículo publicado por primera vez en NOS (Nederlandse Omroep Stichting)
Fuente: NOS.nl
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