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Para 40 años Anežka Kašparková renueva la capilla de su pueblo con murales de color azul eléctrico cada dos años, junto a las casas de los vecinos, hasta el día de su fallecimiento en 2018.
Una mujer de 90 años de la República Checa pasa su jubilación pintando los edificios locales
En en pequeño pueblo checo llamado Louka, una mujer tiene como misión crear algo bello en la capilla de su pueblo y en la casa de los vecinos. Anežka Kašpárková era una mujer de 90 años formada en agricultura que eligió un nuevo hoppy después de jubilación.
Obras de arte pintadas por esta abuela checa, Anežka Kašparková Esta abuela, a pesar de una enfermedad, temblores en las manos y dolor de espalda y piernas, pintaba los edificios locales con un patrón florar tradicional. Source: YouTube/TetianaArt
Kašparková paso mucho tiempo trabajando en el campo y cuidando de su familia
Anezka Kašparková era una artista de 90 años que realizaba su pasión por el arte urbano. Kašparková que viene de un pequeño pueblo en el sur de la República Checa nos enseñó que nunca es tarde para cumplir tus sueños.
Kašparková paso mucho tiempo de su vida trabajando y cultivando plantas en los campos y cuidando de su familia.
Una vez que se jubiló, hace unos 40 años, empezó a trabajar en su sueño de ser una artista. Empezó a tomar clases de dibujo.
Uno de los proyectos más bonitos de Kašparková esta en un pueblo pequeño llamado Louka en la República Checa, donde solo viven 70 personas. Sigue leyendo para ver sus obras de arte.
La capilla del pueblo se pintaba cada dos años Kašparková, era conocida por dibujas flores. Ella decidió hacer uso de la capilla del pueblo y algunas casas de los vecinos para demostrar su arte. Se aseguraba de que el azul sea brillante. Source: Facebook/Elevenlife Un andamio improvisado le ayudaba a trabajar Kašparková solo trabajaba con un azul ultramarino por su contraste con las paredes blancas. Source: Facebook/Elevenlife Flores intrincadas y motivos recurrentes fueron su sello distintivo El proyecto de pintar flores por el pueblo tomó mucho de su tiempo. Cada verano volvía al pueblo para pintar por encima, y pintaba la capilla cada dos años ya que la volvían a pintar de blanco. Source: Facebook/Elevenlife El azul ultramarino destaca sobre el blanco de las paredes Puede parecer un trabajo cansino, pero Kašparková no se rendía. La artista se lo tomaba muy enserio. Source: Facebook/Elevenlife A pesar de sus dolores, la artista no paraba de pintarSource: Facebook/Elevenlife Su dedicación al arte se convirtió en algo legendario en la región Kašparková usaba escaleras para decorar las partes más altas de las paredes. Source: Facebook/Elevenlife Hacia todo su trabajo gratis y usaba la mejor pintura Mrs.Anežka Kašparková murió el 12 de Marzo del 2018, a los 90 años. Source: Facebook/Elevenlife Kašpárková se convirtió en una verdadera artista Cuando se jubiló, una mujer llamada Maňák se convirtió en la profesora de Anežka Kašpárková. Source: Facebook/Elevenlife Flores de fantasía a mano alzada fluyeron de su pincel Todo salía de su imaginación, dejaba que su pincel decidiera los resultados finales. Source: Facebook/Elevenlife El legado sigue vivo: Marie Jagošová pintando las decoraciones Cuando Anežka Kašpárková falleció, el alcalde del pueblo esperaba que alguien podría cuidar de los dibujos de la capilla. A finales del 2018, Marie Jagošová, un miembro familiar, decidió continuar su trabajo como voluntaria. Source: CT24
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